Extraordinaria actuación de A Fons Perdut en los 10 kms del C.N. Sabadell

Los atletas de A Fons Perdut han demostrado una vez más estar a la altura de las circunstancias. Pese a una salida en falso y un trazado rompepiernas los cuatro representantes del club: Jaume, Ricard, Fernando y el menda, batimos nuestras marcas personales en los 10.000 metros de Sabadell. La carrera, con salida y llegada en la sede del Club Natació Sabadell, discurrió por algunas de las calles más emblemáticas de la capital del Vallès Occidental: Gran Vía, Rambla, etc. Desconcertante la salida en falso y decepcionante la organización del avituallamiento a la llegada: una cola interminable en la que te quedabas helado para acabar recibiendo un miserable puñado de patatas fritas y un ejemplar atrasado del Runner's World.

Media Maratón de Montaña de Collserola

En el Velódromo de Horta tomamos la salida de la que iba a ser nuestra primera media maratón de montaña. Corríamos en terreno conocido, aunque nunca antes habíamos hecho tanta distancia seguida por los senderos de la Sierra de Collserola, escenario habitual de nuestros entrenamientos de cada domingo. Alex, el hermano de Fernando, se estrenaba en competición. Bien podía haber empezado con la Cursa de Bombers, la de la Mercè o la del Corte Inglés, como todo el mundo, pero el muy loco eligió para debutar una media maratón de montaña, ahí es nada. En la salida coincidimos con los superhombres que participaban en la prueba de 42 kilómetros y con varios equipos de invidentes de la ONCE que se atrevían con la media, lo que aún tiene mucho más mérito. El primer kilómetro fue extremadamente lento, ya que por el sendero que sube zigzagueando desde las inmediaciones del velódromo hasta la carretera de Horta es casi imposible adelantar y se formaron numerosos tapones. Una vez en la bajada hacia Can Coll el pelotón se deshizo y a partir de ahí cada uno hizo lo que pudo por pistas y trialeras. Era admirable ver la velocidad que llegaban a alcanzar los corredores de la ONCE agarrados a la pértiga que sujetaban sus guías. Fueron más de dos horas de esfuerzo, en una mañana muy calurosa, que se vieron recompensadas con una comida en el Hotel San Bernat, en el corazón del Montseny. Aunque la calidad de los platos fue correcta, el servicio de comedor, increiblemente lento, deslució el evento gastronómico. Aprovechamos la larga mesa y sobremesa para decidir la constitución formal de un club atlético, acordando por unanimidad la denominación social de "A Fons Perdut". La espera fue amenizada por algunos de nuestros vástagos que aprovecharon para jugar con los perros que dan nombre al hotel y, de paso, pegarse un remojón fortuito en el estanque.